Hace algunos meses me invitaron a platicar con un grupo de niñas sobre como es “ser Arquitecta” y después de una serie de preguntas divertidas tuvimos una actividad: con palillos, gomitas y bombones tenían que construir la torre más alta.
Las niñas se agruparon casi todas por edades: las de 9 años estaban haciendo la torre perfecta formando cubos, las niñas de 7 copiaban a las más grandes y todas se preocupaban por cuidar que no se derrumbara, pero las niñas de 5-6 años ponían palillos y gomitas por todos lados. Cuando les avisamos que tenían 5 minutos para terminar el equipo de las niñas chiquitas se empezó a preocupar porque su torre tenia una forma diferente a las demás entonces una de ellas les dijo susurrando:
“Dijeron que hiciéramos la torre más alta,
no la más cuadrada”
y siguieron poniendo palillos y gomitas sin ningún sentido atacadas de risa, estoy segura que fueron las que mas se divirtieron.
En teoría yo iba a compartir un poco de “ser adulta” pero ellas me enseñaron mucho más recordándome lo simple que es ser "como niña"… ¿En qué momento, mientras crecemos, dejamos de hacer las cosas a nuestro gusto y empezamos a volvernos cuadrados?
Muchas veces el camino para lograr lo que nos proponemos no es tradicional, ni sencillo y muchas veces parece no tener sentido pero eso es exactamente lo que hace que sea SÓLO TUYO; disfruta el proceso, estoy segura que cuando lo logres te darás cuenta que cada palillo y cada gomita valieron la pena.
Emma he leído cada uno de tus post y en definitiva cada vez me atrapa tu redacción....éste artículo en lo particular me dejó un muy lindo mensaje...sigue escribiendo...eres buena...un abrazo!!!
ResponderBorrarTienes toda la razon. :)
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